Tool, Jung, sombras y cromosomas II.

La sombra es un complejo inconsciente definido como los aspectos reprimidos y negados de nuestro self. Carl Jung enfatizó la importancia de estar conscientes de nuestra sombra e incorporar su material a nuestra conciencia. De no hacerlo, proyectamos estos aspectos en los demás.

Ahora, no todo lo negado y reprimido son aspectos que consideramos negativos o malos acerca de nosotros mismos, a veces también negamos lo bueno y positivo que hay en nosotros, aunque lo podemos ver en otras personas (¡lo estamos proyectando!).


Nuestras sombras se cruzan, se reconocen y se saludan...
y nosotros ni nos damos por enterados.

Estación dos.

Me resulta imposible continuar elaborando esta serie de posts sin compartir la letra de la canción “Forty Six & 2” de Tool, siento que resonará en cualquiera que se haya atrevido a contemplar su sombra (la gran mayoría nos pasamos la vida negándola, reprimiéndola y proyectándola en los demás) y en quienes no, quizás los motive a atreverse a contemplar, vale la pena el intento…

My shadow's (Mi sombra está)
Shedding skin and (Mudando piel y)
I've been picking (He estado escarbando)
Scabs again. (Costras otra vez)


I'm down (Estoy abajo)
Digging through (Cavando a traves de)
My old muscles (Mis viejos musculos)
Looking for a clue. (Buscando una pista)


I've been crawling on my belly (He estado reptando sobre mi panza)
Clearing out what could've been. (Aclarando lo que pudo haber sido)
I've been wallowing in my own confused (He estado revolcandome en mis propios confusos)
And insecure delusions (E inseguros delirios)

For a piece to cross me over (Por una pieza que me cruce al otro lado)
Or a word to guide me in. (O una palabra que me guie adentro)
I wanna feel the changes coming down. (Quiero sentir los cambios que vienen)
I wanna know what I've been hiding in (Quiero saber que he estado ocultando en)

My shadow. (Mi sombra)
Change is coming through my shadow. (El cambio esta llegando a traves de mi sombra)
My shadow's shedding skin (Mi sombra esta mudando piel)
I've been picking (He estado escarbando)
My scabs again. (Mis costras otra vez)


Lidiamos con la realidad de nuestra sombra de cuatro maneras diferentes: Negación (simplemente negamos o reprimimos su existencia), Proyección (proyectamos aquello inaceptable en nosotros hacia los demás), Integración (aceptamos nuestra sombra como parte de nuestro self) y/o Transmutación (convertimos lo negativo o malo en algo positivo o bueno, a través de la sublimación).

I've been crawling on my belly (He estado reptando sobre mi panza)
Clearing out what could've been. (Aclarando lo que pudo haber sido)
I've been wallowing in my own chaotic (He estado revolcandome en mis propios caoticos)
And insecure delusions. (E inseguros delirios)

I wanna feel the change consume me, (Quiero sentir el cambio consumiendome)
Feel the outside turning in. (Sentir lo externo volviendose hacia adentro)
I wanna feel the metamorphosis and (Quiero sentir la metamorphosis y)
Cleansing I've endured within (Purificacion que soporte dentro de)

My shadow (Mi sombra)
Change is coming. (El cambio viene)
Now is my time. (Ahora es mi tiempo)
Listen to my muscle memory. (Escuchar mi memoria muscular)
Contemplate what I've been clinging to. (Contemplar a lo que me he aferrado)
Forty-six and two ahead of me. (Cuarenta y seis y dos delante de mi)

I choose to live and to (Yo elijo vivir y)
Grow, take and give and to (Crecer, tomar y dar y)
Move, learn and love and to (Moverme, aprender y amar y)
Cry, kill and die and to (Llorar, matar y morir y)
Be paranoid and to (Ser paranoico y)
Lie, hate and fear and to (Mentir, odiar y temer y)
Do what it takes to move through. (Hacer lo necesario para atravesar)

I choose to live and to (Yo elijo vivir y)
Lie, kill and give and to (Mentir, matar y dar y)
Die, learn and love and to (Morir, aprender y amar y)
Do what it takes to step through. (Hacer lo necesario para atravesar)

Ponderamos en la entrada anterior la posibilidad de la existencia de tres niveles de evolución, cada uno de ellos marcados por la aparición de dos cromosomas adicionales. El primer nivel no ve nada fuera de ellos como algo separado de ellos (un solo self, muy parecido a la supuesta incapacidad, según la teoría psicodinámica, del individuo con autismo de comprender que su self esta contenido dentro de sí, una teoría fascinante y hermosa de la cual quizás hable en el futuro).

Son como las células dentro de un cuerpo, conectados a una sola consciencia que se mueve a través de ellos. Una vez más, surgen referencias de tribus aborígenes en Australia y África (¿será que logro constatarlas antes de terminar de escribir este post, llegar al final de este viaje?).

Ya hablamos de nuestro nivel, el segundo, una conciencia en desarmonía (como un instrumento mal afinado, con todo el potencial de producir acordes perfectos si logra afinarse adecuadamente). La hipotética meta de esta hipotética teoría, un tercer nivel donde cada una de nuestras células posee so propia conciencia... si es que logramos integrar la sombra...

See my shadow changing, (Veo mi sombra cambiando)
Stretching up and over me. (Estrechandose hacia arriba y por encima de mi)
Soften this old armor. (Suavizando esta vieja armadura)
Hoping I can clear the way (Esperando poder abrir mi camino)


By stepping through my shadow, (Al atravesar mi sombra)
Coming out the other side. (Salir del otro lado)
Step into the shadow. (Entrar en la sombra)
Forty six and two are just ahead of me. (Cuarenta y seis y dos estan delante de mi)


¿Valió la pena el intento? - Izzy

Fragmentos de estos artículos extraídos de:
Estación uno: “Forty Six & 2 Explanation” - http://www.youtube.com/watch?v=OufK0647p1U
Estación dos: “Forty Six & 2 - Tool” - http://www.youtube.com/watch?v=Tja6_h4lT6A
Estación tres: “The 44 Chromosome Man” -http://genetics.thetech.org/original_news/news124

Tool, Jung, sombras y cromosomas.

Les cuento, me gusta pensar que, si Carl Jung estuviera vivo, disfrutaría inmensamente de la música de la banda de rock Tool. De ahí que tener la oportunidad de escribir un post acerca de una de sus canciones, “Forty Six & 2” (Cuarenta Seis & 2) y ahondar en sus conexiones con la teoría Jungiana, el concepto de la sombra y nuestros cromosomas me resultó totalmente irresistible, la oportunidad perfecta para hablar de psicología y rock n’ roll.

Mi viaje a través de la canción “Forty Six & 2” comprende tres partes, correspondientes a las fuentes principales que consulté, y si bien podría profundizar en mi búsqueda de fuentes, terminaríamos con un artículo (o serie de artículos) más extenso del que me interesaría escribir y del que les interesaría leer, porque no hay nada más feo y pretencioso que querer adornar lo simple con exceso de complicado.

Tool. Banda de rock.

Estación uno.

Esto comenzó casualmente (es decir, pura serendipia, esos accidentes felices a los que llamamos casualidad) porque no estaba buscando conocer una teoría nueva acerca de nuestros cromosomas ni se me había ocurrido la relación de la canción con el concepto Jungiano de la sombra, ¡yo solo quería escuchar “Forty Six & 2” de Tool!

La “teoría” de esta primera etapa de mi viaje aparentemente la debo a Carlos Montero y Gustavo Bolaños, quienes aparecen mencionados en el video cuyo enlace proporciono al final del post. Ante la falta de certeza, daré crédito donde supongo que el crédito es debido. 

La teoría Jungiana se basa en la teoría de Carl Jung de que estamos en constante estado de evolución y nuestros cromosomas evolucionan para que podamos adaptarnos y convertirnos en seres más avanzados. Tal como dicen, es un concepto bastante arriesgado, pero después de todo, Jung era un tipo arriesgado, un rockstar en la época en que todavía no habían inventado a los rockstars.

Carl Jung. Rock star (y psicólogo).

La teoría en si se basa en el libro de Bob Frissel titulado “Nothing in this book is true, but it’s exactly how things are” (Nada en este libro es verdad, pero es exactamente como son las cosas). Les aclaro que no hay fundamento científico detrás de nada de esto, estamos pensando fuera de la caja, darse el permiso de pensar en lo impensable, ¿vale?

El pensamiento básico de Bob es el siguiente: Hay tres niveles de evolución humana, cada nivel tiene su propia forma de conciencia.

El primer nivel corresponde a seres humanos con 44 cromosomas. Estas son tribus primitivas como los aborígenes australianos que no perciben nada fuera de su propio ser. ¿44 cromosomas? Me consta, gracias al libro “S=ex2” de Pere Estupinyá que estoy leyendo, que los seres humanos tenemos 46 cromosomas. No me consta en lo absoluto si esta teoría de aborígenes australianos con 2 cromosomas de menos es real o no, ni sé de dónde sacaron los autores esta información, aunque si me consta que los aborígenes australianos tienen un concepto bastante interesante y diferente acerca de la existencia.

Ellos ven una sola conciencia, sin diferencia entre los diversos organismos. Muy parecido al inconsciente colectivo de Jung, solo que parece más un consciente colectivo, ¿no les suena? 

"¿44? No, señor, la última vez que conté, tenía 46, como todos los demás..."

Luego viene el segundo nivel, aquí estamos nosotros. Aparentemente somos una conciencia muy caótica y desorganizada (bueno, eso no suena particularmente inverosímil) que es básicamente un punto intermedio entre el primer y tercer nivel.

El tercer nivel son 48 cromosomas. 46 y 2, como dice la canción. Este sería el nivel más alto de conciencia.

La razón por la cual no podemos evolucionar, y aquí el tema se torna fascinantemente Jungiano, es debido a algo llamado “la sombra”. La sombra es todo aquello que tememos y detestamos de nosotros mismos (nuestros aspectos negados y/o reprimidos, y por ende proyectados en los demás).

Llegar al tercer nivel es querer movernos hacia adelante espiritual e intelectualmente mientras nuestros cromosomas evolucionan. Esto no es tan simple como parece, porque no es solo una cuestión de sombras, sino también de matemática (y/o geometría), algo que Bob llama “matemática (y/o geometría) sagrada” y un concepto que Tool utiliza profusamente, desde las métricas de las letras de sus canciones, los cambios de tiempo en ellas e incluso la manera en que la batería se posiciona en el estudio de grabación. Si, por eso y mucho más Tool es una banda tan fascinante.

Cromosomas. Hacen bandas de rock, rock stars, psicólogos y
aborígenes australianos, entre otras cosas.

De todas maneras, las “matemáticas sagradas” no son el tema, al menos no en este momento y quizás si en un post futuro, ya que no hay nada más divertido que poder volver a usar a Tool como excusa para escribir un post, ¿o es usar al post de excusa para volver a escribir sobre Tool?

Supuestamente, el movimiento matemático necesario para que la humanidad se mueva hacia el tercer nivel se dio en 1989, pero como es común en estos temas tan metafísicos, por alguna razón… no paso naranja. Me imagino que Bob se decepcionó bastante, ¿Tool? Quién sabe…

Pero, ¿y que pasaría supuestamente cuando desarrolláramos dos cromosomas extras? Dicen los autores que el cambio principal seria una transición hacia una “conciencia unitaria”, es decir, cada célula de nuestro cuerpo tendría su propia conciencia y memoria. ¿Suena loco, no? ¡Apenas podemos arreglárnosla con una sola conciencia y memoria, imagínense lidiar con millones de millones! Aun así, como psicólogo, no puedo negar que como concepto, es súper interesante.

Es que para mí, los cromosomas harían totalmente factible la teoría de Jung acerca del “inconsciente colectivo”, una memoria o conciencia compartida por todos. Pensemos en teorías como la de los “6 grados de separación” (de la que me muero por hablar en algún post futuro), si cada uno de nosotros está separado de cualquier otra persona en el mundo por una cadena de al menos, pero no más, de 6 eslabones, y si nuestros cromosomas, además de transportar un mundo de información genética sobre nuestros antepasados, también transportan su memoria, vivencias, conocimientos, etc., ¿sería imposible o tan improbable que cada uno de nosotros contenga potencialmente al menos una parte de todos los demás?

Así, nosotros, el ser superior que ocupa el cuerpo, haríamos que los millones de diferentes conciencias en nuestro cuerpo trabajasen juntas como una. Hey, la teoría psicodinámica habla de un yo, un ello y un súper yo, y la teoría transaccional habla de una diversidad de posibles estados del ego, básicamente tres: Niño (ello), Adulto (yo) y Padre (súper yo); pero podemos tener varias versiones de cada uno, de ahí a varios millones solo hay… varios millones de pasos, si, pero pasos posibles. - Izzy

Fragmentos de estos artículos extraídos de:
Estación uno: “Forty Six & 2 Explanation” - http://www.youtube.com/watch?v=OufK0647p1U
Estación dos: “Forty Six & 2 - Tool” - http://www.youtube.com/watch?v=Tja6_h4lT6A
Estación tres: “The 44 Chromosome Man” -http://genetics.thetech.org/original_news/news124

¿Perfeccionando el arte de la decepción?


Un estudio de New Northwestern University nos enseña que con un poco de práctica, podemos aprender a decir una mentira que puede ser indistinguible de la verdad.

¿Es esto algo a lo que deberíamos aspirar a aprender? En mi experiencia y la del famoso niño que gritaba “¡Lobo!” (y también la de Pinocho, por supuesto, que nunca puede faltar en un post así), la respuesta es "no".

Las personas generalmente toman más tiempo y cometen más errores al decir mentiras que al decir la verdad, porque tienen dos respuestas conflictivas en sus mentes y están suprimiendo la respuesta honesta, según estudios anteriores.

Los investigadores hallaron que tan solo la instrucción significativamente reducía los tiempos de reacción asociados con las respuestas deceptivas de los participantes. Es por eso que la gente que miente dedica tiempo a elaborar sus mentiras. Mejor ir a terapia y usar ese tiempo en descubrir los beneficios de decir la verdad, o al menos evitar mentir.

Nuestros padres nos “enseñan” a no mentir y a decir siempre la verdad, pero entre lo que se nos enseña superficialmente versus esos mensajes indirectos que recibimos desde pequeños que nos dicen lo contrario (algo asi como “Di siempre la verdad, siempre y cuando esa verdad sea lo que yo quiero escuchar”), creo que para cuando llegamos a adultos nos tienen enredados.

Para complacer y no “herir sentimientos” o “lastimar a los demás”, empezamos a distorsionar nuestras verdades en verdades a medias, a tres cuartos y cuando menos lo pensamos, nos volvimos un solo Pinocho. Si, con las mejores intenciones, pero no menos Pinochos por ello.

Qué mejor oportunidad que el proceso terapéutico para aprender a ser uno mismo, y decir lo que uno quiere decir sin tener que censurarse por lo que los demás desean escuchar. Las demandas y expectativas de los demás son, al fin y al cabo, de los demás, no nuestras. Apropiarse de lo que es propio se siente bien, desenreda y nos ayuda a no confundirnos (y dejar que nos confundan). - Izzy

Fragmentos extraídos del articulo “Deception can be perfected”, publicado por Medical News Today.