Café con TCC - V: La Terapia Cognitivo Conductual (T.C.C.) - I.

El esquema básico.

La Terapia Cognitiva está basada en el modelo cognitivo que postula que las emociones y conductas de las personas están influidas por su percepción de los eventos.




Las reacciones pueden ser Emotivas, Conductuales o Fisiológicas. Los pensamientos automáticos son los pensamientos evaluativos, rápidos y breves que no suelen ser el resultado de una deliberación o razonamiento, sino más bien parecen brotar automáticamente.

Los pensamientos automáticos surgen de las creencias. Estas creencias son ideas que son tomadas por la persona como verdades absolutas.

Las creencias más centrales o creencias nucleares son interpretaciones tan fundamentales y profundas que las personas frecuentemente no las expresan ni aun a sí mismas, o no tienen clara conciencia de ellas. Estas creencias nucleares desarrolladas desde la infancia consisten en definiciones, evaluaciones o interpretaciones de sí mismos, de las otras personas y de su mundo.

Las creencias nucleares representan el nivel más profundo, fundamental, rígido y global de interpretación, que influye en los otros niveles. Los pensamientos automáticos representan el nivel más superficial de cogniciones. Entre ambos niveles están las creencias intermedias. Las creencias intermedias están constituidas por:

- Reglas (normas).

- Actitudes.

- Supuestos.


La disfuncionalidad.

Se consideran disfuncionales a los pensamientos que:

- Distorsionan la realidad.

- Son causa de perturbación emocional (emociones disfuncionales).

- Interfieren con la capacidad del paciente para lograr sus metas.


Los pensamientos se pueden evaluar en función de dos conceptos:

- Su validez (ajuste a la realidad).

- Su utilidad o consecuencias (concepción pragmática).


Un pensamiento puede ser disfuncional por uno o más de los siguientes criterios:

- No coinciden con los hechos observables (realidad).

- Aunque se ajustan a la realidad en la observación, incluyen conclusiones erróneas.

- Generan consecuencias disfuncionales, indeseables o que dificultan o impiden el logro de los objetivos de la persona.


Las causas de los pensamientos disfuncionales.

En principio, la terapia cognitiva tiene una visión integrada del origen o causa de los esquemas y respuestas inadaptadas: Las causas genéticas y orgánicas se suman a las experiencias vividas, el entorno y el aprendizaje social. Esta teoría reconoce en las personas la predisposición a determinadas formas de distorsión cognitiva (vulnerabilidades cognitivas), que a su vez predisponen a determinados síndromes.

Las estrategias y los esquemas.

Según Beck las estrategias son formas de conducta o respuestas destinadas a servir a metas biológicas. En los seres humanos el término puede aplicarse tanto a las conductas o respuestas adaptadas como a las inadaptadas.

La integración de los datos sensoriales brutos y la adscripción de significado es función de un orden superior de estructuración conformado por esquemas: estructuras cognitivas que integran y adscriben significado a los datos sensoriales percibidos. El contenido de estos esquemas puede referirse a las relaciones interpersonales o a categorías impersonales (objetos inanimados concretos o abstractos).

El origen de los esquemas.

Este modelo atribuye un origen mixto genético-cultural a los esquemas. Considera lo genético como tendencias innatas sobre las cuales incidirán las experiencias vitales (circunstancias e influencias del entorno).

Cualidades o características de los esquemas.

- Nivel energético o de activación (de latentes a hiperactivos).

- Amplitud (de reducidos a amplios).

- Flexibilidad (de modificables a impermeables).

- Tema (personales, familiares, religiosos, sexuales, etc.).

- Área o componentes (cognitivos, conductuales, emotivos o motivacionales).

- Profundidad o nivel (de nucleares a periféricos).


La triada cognitiva.

Alford y Beck definen como triada cognitiva a los significados o interpretaciones inadaptadas o disfuncionales que la persona hace de:

- Sí mismo.

- Su entorno contextual o sus experiencias.

- Su futuro (metas).


Próxima parte: La Terapia Cognitiva Conductual (T.C.C.) de Aaron T. Beck – II.

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